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Tratamiento
conductual de la ansiedad.
El número de estudios
sobre este problema entre las personas mayores es limitado. Las
investigaciones acerca de la ansiedad generalmente han excluido la población
de más edad, si bien la información actualmente disponible confirma la
utilidad de las intervenciones conductuales. Es muy común este tipo de
trastornos en las personas mayores, y es necesario examinar las similitudes
y diferencias en las manifestaciones de los trastornos de ansiedad en la
vejez con respecto a población adulta en general.
Tradicionalmente, se ha considerado que la ansiedad tiene un valor
adaptativo y que actúa como un sistema de señales de alerta ante
acontecimientos potencialmente dañinos o ante un peligro próximo. Esta
respuesta puede considerarse desadaptativa, sin embargo, cuando se
manifiesta de una manera excesiva. Habitualmente la ansiedad se manifiesta
mediante un conjunto de síntomas cognitivos (preocupaciones, miedo),
conductuales (evitación, tensión muscular) y fisiológicos (hiperventilación,
taquicardia), cuya severidad puede variar desde una preocupación excesiva
acerca de acontecimientos cotidianos relacionados con la familia, la salud y
la economía hasta episodios de intensa ansiedad y miedo como ocurre en los
ataques de pánico.
A pesar de que los trastornos de ansiedad son más prevalentes que los
trastornos del estado de ánimo en la edad avanzada, pocos estudios se han
centrado específicamente en la evaluación y tratamiento de la ansiedad en
este grupo de edad. Este hecho es sorprendente dada la importancia de este
problema, pues la ansiedad es uno de los principales. También, entre el 10 y
el 20% de las personas mayores experimentan síntomas significativos de
ansiedad.
Cuando se examina la ansiedad (como cualquier otro problema) es importante
considerar el curso del trastorno a lo largo de la vida, no debiendo olvidar
que la ansiedad puede haberse desarrollado por primera vez en la edad
avanzada o bien puede haber comenzado en una edad temprana y haber
continuado hasta esta etapa de la vida, en cuyo caso el envejecimiento puede
haber tenido también efectos relevantes sobre la sintomatología relacionada
con la ansiedad. |
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