Historia de la consciencia de la humanidad. Presentación.

En el espacio anterior hemos visto cómo funciona normalmente la máquina humana, aquí vamos a adentrarnos un poco en sus orígenes. Lo haremos desde dos perspectivas que, aun siendo distintas, no sólo son coherentes entre sí sino que se refuerzan mutuamente.

La primera se apoya sobre un modelo sencillo de la estructura del ser humano, el que describimos en el primer espacio. Puede tomarse como punto de partida para un estudio más profundo; es un modelo ampliamente aceptado. En cualquier caso, tomaremos esa perspectiva como hipótesis de trabajo. La segunda, más elaborada, nos llevará a buscar a través de los distintos campos del conocimiento todo aquello que pueda aportarnos alguna luz sobre la evolución de la consciencia de la humanidad. Porque, si los comportamientos limitadores de los seres humanos proceden de un cierto estado de consciencia, tendremos que hacernos algunas preguntas: ¿Por qué ese estado? ¿De dónde proviene? ¿Hay posibilidad de modificarlo?

Para controlar mejor nuestro destino, tanto individual como colectivo, hemos de conocer nuestra historia, la historia de nuestra consciencia. Podemos preguntar a hombres y mujeres de ciencia, a biólogos, a historiadores; comprobaremos que sus respuestas son interesantes, pero parciales. En cambio, las respuestas que encontramos en los Maestros de sabiduría y en las principales tradiciones filosóficas y espirituales de la humanidad, nos parecen por ahora globales y, al mismo tiempo, totalmente acordes con la realidad del ser humano. No sólo eso, sino que su perspectiva parece ser cada día más exacta a medida que avanza la acelerada historia que vivimos hoy en día. Y son coherentes con muchos descubrimientos realizados en época reciente en el campo de la ciencia y de la psicología de vanguardia. Sus respuestas, además, lejos de estar separadas de otros aspectos del conocimiento contemporáneo, lo incluyen y lo amplían.

Esas enseñanzas han sido desdeñadas, por no decir despreciadas, por la filosofía científica materialista de nuestro tiempo, que describe la realidad y construye «su verdad» a partir de datos físicos. Es una manera entre otras de percibir la realidad, que, por cierto, tiene su lugar en el campo del conocimiento humano; pero tiene también sus límites, puesto que el mundo no es sólo material: la materia física sólo es un aspecto de la energía universal. La física nuclear se encuentra en la confluencia entre el mundo material y el mundo energético, y muchos campos de la ciencia materialista están llegando a sus límites físicos (biología molecular, ingeniería genética, etc.). Los científicos de espíritu abierto están descubriendo en la actualidad otros muchos aspectos de la realidad. Algunos investigadores contemporáneos(Fritjof Capra, Robert Dutheil, Rupert Sheldrake, David Bohm, Vale-rie Hunt, Hubert Reeves, etc.) que no están anclados en el pasado y miran objetivamente y sin prejuicios hacia nuevos horizontes, están haciendo vivir a la ciencia materialista una revolución tranquila que la lleva de nuevo hacia las enseñanzas de los más grandes estudiosos del esoterismo de la historia de la humanidad (Desde los más recientes, como Alice A. Bailey, Max Heindel, Rudolph Steiner, H. P. Blavatsky, hasta los más antiguos, los que proporcionaron los tesoros de sabiduría de la Bhagavad-Gita, de la Cabala, de los Vedas, etc.) confirmándolas en todos sus aspectos. Así pues, ése es el marco que proporciona la perspectiva más amplia desde la que se puede estudiar la historia de la consciencia de la humanidad; ofrece un contexto amplio para la búsqueda interior y desmitifica muchas creencias relativas al ser humano y al lugar que ocupa en el Universo.

Así pues, haremos una sucinta exposición de algunas de las ideas que propone el esoterismo, no por presentar una teoría más, sino porque es la perspectiva más amplia e interesante desde la que podemos abordar las cuestiones fundamentales y prácticas que nos planteamos a propósito de la consciencia humana: ¿Por qué el ser humano se conduce en la vida cotidiana de la forma que lo hace? ¿Por qué todavía no está en condiciones de vivir en paz consigo mismo y con los demás? ¿Por qué existe la guerra, interior o exterior? ¿Por qué la vida no siempre es hermosa? ¿Por qué tenemos tantas limitaciones, cuando todos aspiramos a la dicha y al bienestar? ¿Cambiará esta situación algún día? ¿Cómo? No nos conformamos con respuestas simplistas en términos de bien o de mal, necesitamos una comprensión más profunda de las cosas de la vida.

El estudio de la realidad, desde la perspectiva esotérica, que es lo que vamos a hacer en este capítulo, permitirá una comprensión más profunda de los espacios siguientes. Aunque si uno quiere prescindir de este espacio, puede hacerlo; no por ello dejarán de serle útiles los espacios web siguientes. En ese caso, tendrá que limitarse a observar el funcionamiento del ser humano apoyándose, sencillamente, en el modelo propuesto en el primer espacio.

Además, esta perspectiva esotérica es un enfoque muy amplio que conduce de un modo natural y lógico a encontrar medios prácticos y eficaces para conocer y dominar el conjunto de la dinámica humana. Por último, no plantea ningún obstáculo a la investigación, y propicia el que algún día puedan hacerse nuevos descubrimientos en ese campo.

Algunas personas ya están familiarizadas con estas ideas. Recordarlas les servirá para clarificar ciertos puntos que, a menudo, quedan un poco vagos en la literatura esotérica. Quienes no estén familiarizados con ellas, pueden tomarlas como hipótesis de trabajo, como punto de partida para la investigación, y, en todo caso, deben estar abiertos a una percepción más amplia de las cosas. No es necesario «creer» en esa información. Basta considerarla como una perspectiva posible, y observar si entra en resonancia con la percepción intuitiva y con el sentido común, por un lado, y con la realidad del mundo tal como es en la actualidad, por otro.

Como este espacio es un resumen de datos muy complejos, para facilitar su comprensión proponemos el siguiente esquema:

Plan del espacio

1. Introducción a la perspectiva esotérica
2. Historia del descenso de la consciencia a la materia
2.1. La finalidad del viaje
2.2. El proceso de involución
2.3. El proceso de evolución
2.4. Nuestra época, momento crucial en la historia de la humanidad
3. La construcción del instrumento de manifestación del Ser desde el momento de la individualización hasta la actualidad
3.1. Principio general, los sucesivos descensos hacia el mundo físico
3.2. La desaparición de los tres cuerpos
3.3. Los átomos permanentes
3.4. ¿Cómo se construye una nueva personalidad?
3.5. No somos el resultado de nuestro pasado
3.6. Aspecto colectivo de la evolución
4. Las motivaciones de la búsqueda interior


Las preguntas que nos interesan son las siguientes: ¿Cómo hemos llegado a la situación actual? ¿Por qué la consciencia está atrapada en el ego cuando esto la hace sufrir tanto y le resulta tan destructor? ¿Saldremos algún día de esta situación? Y también nos interesan estas otras: ¿QUIÉNES SOMOS? ¿DE DÓNDE VENIMOS? ¿ADONDE VAMOS?