ESTRUCTURA PSICÓPATA, RESUMEN

• Miedo fundamental de la estructura: miedo a no ser amado, a perder poder e influencia, miedo a la traición.

• Experiencias pasadas que están en el origen: haber ocupado una posición de poder seguida de traición, traumatismo por la pérdida de poder.

• Carga emocional: orgullo, arrogancia, egoísmo, necesidad de ser amado, necesidad de popularidad.

• Sistema de defensa: seducción, manipulación, realización de acciones extraordinarias, importancia de la imagen, búsqueda de influencia y de poder, falsedad.

• Declaración del sistema de defensa: «¡Amadme!».

• Trabajo por realizar: no estar aferrado a la necesidad de ser amado, volver a encontrar su verdadera identidad, volver a encontrar la fuente del amor verdadero.

• Declaración de transformación: Utilizo mi poder para amar y servir.

Tarea de contribución

Aportar un ejemplo del poder puesto al servicio del amor.

¡Todo un programa! Esta estructura proporciona una capacidad de contribución excepcional. En realidad, tarde o temprano, todo el mundo ha de experimentarla y transformarla, pues es la estructura vinculada al poder. Una vez transformada, pondrá en acción en el mundo el poder del alma, es decir, pondrá al servicio de la humanidad todo el talento, las cualidades, los conocimientos y poderes que la persona ha ido desarrollando a lo largo de sus vidas.

Su principal contribución al progreso de la humanidad
consiste en ser un ejemplo de la liberación del poder del ego,
y de la manifestación del poder del alma mediante el amor
verdadero, la impersonalidad y el don de sí mismo.

Cualidades fundamentales que el alma debe reencontrar:

El amor verdadero, la impersonalidad, la humildad, la sencillez, el don de sí mismo.
Cualidades de la estructura transformada: AMOR verdadero, calor humano, compasión, generosidad, originalidad, creatividad, energía elevada, integridad, humor, inteligencia, riqueza interior.

Tarea de contribución:

Aportar un ejemplo del poder puesto al servicio del amor en todos los campos de la actividad humana.

¡BRAVO, PSICÓPATA! ¡TE AMAMOS COMO ERES!

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