Estar aquí y ahora.
La meditación es una herramienta que sirve para introducirnos en nuestro
interior y ver nuestras deficiencias psicológicas, emocionales y físicas. Y,
desde el conocimiento de lo que somos en realidad, comenzar el camino
de nuestra propia recuperación.
Normalmente vivimos en un estado de
tensión y nervios en el que nuestros problemas más profundos quedan
enmascarados por otros sucesos más triviales o también por la sucesión de
los días en un trabajo y quehacer rutinarios.
Sin embargo, todos/as
hemos sentido que el aguijón de la insatisfacción altera nuestro equilibrio
emocional sin que sepamos, a ciencia cierta, encontrar el origen concreto de
esa sensación de desasosiego, vacío y malestar.
Muchas personas viven
inmersos en el malestar y el sufrimiento y culpan de ello a las influencias
externas. Muchas de ellas están convencidas de vivir en un mundo hostil y
agresivo. Pero, la explicación del comportamiento de las personas que nos
rodean puede entenderse desde nuestro propio comportamiento. Por ejemplo, si
nuestra actitud es permanentemente sumisa y pasiva, es muy probable que
estemos "provocando" con ello la agresividad de los demás.
Pero, ¿cómo podemos
suprimir las carencias del comportamiento? Desde luego, el simple esfuerzo
de la voluntad es insuficiente, pues los comportamientos humanos suelen
estar demasiado enraizados en la personalidad más profunda.
La meditación es una
forma de acceder al conocimiento de uno mismo y nuestro entorno, poder
así vivir y sentir de una manera adecuada y de esta forma conocer el
bienestar.