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CUIDADO DE LA
BOCA. REMEDIOS NATURALES Y CASEROS
· Para curar y fortalecer las encías inflamadas, lo mejor es realizar
enjuagues con esta mezcla: tres gotas de aceite esencial de espliego, una
cucharadita de miel y un cuarto de taza de agua hirviendo.
· Las encías doloridas se alivian frotándolas suavemente con una hebra de
azafrán. Esta planta es un excelente analgésico, pero no se debe abusar de
ella pues tiene propiedades abortivas y estimulantes.
· Contra las encías sangrantes se puede emplear un remedio consistente en
machacar finamente un puñado de hojas de salvia que se deben mezclar con
el dentífrico habitual. Su efecto antiséptico y funguicida protegerá las
encías y, además, mantendrá la limpieza de los dientes.
· Con lavanda, mejorana, tomillo o ajedrea, por separado o combinadas,
puede prepararse una agradable infusión antiséptica que sirve para
enjuagarse la boca y, además, evitar el mal aliento.
· Con el fin de que la halitosis no sea una molestia, sobre todo para
nuestros interlocutores, tome media cucharada de polvo de caolín o unas
gotas de aceite esencial de menta diluidas en un vaso de agua tibia.
También puede probar a masticar menta, hinojo, cardamomo, clavos, granos
de anís, nebrina, manzana y semillas de hinojo.
· La verbena, una de las hierbas mágicas por excelencia, sirve para
aromatizar la casa si se planta en macetas. También alivia las molestias
de un flemón. Para ello, hierva durante diez minutos un puñado en un litro
de vino y aplique sobre la mejilla en compresas calientes.
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