|
EL GOZO Y LA ALEGRÍA DE SER
La infelicidad y la negatividad son una enfermedad en nuestro planeta. Lo que la
contaminación es al plano externo, es la negatividad al plano interno. Está en
todas partes, no solamente en los lugares donde las personas no tienen lo
suficiente, sino todavía más donde la gente tiene más de la cuenta. ¿No es
sorprendente?
No. El mundo desarrollado está más profundamente identificado con la forma, más
atrapado en el ego.
Las personas creen que su felicidad depende de lo que les sucede, es decir, que
depende de la forma. No se dan cuenta de que los sucesos son lo más inestable
del universo porque cambian constantemente. Ven el momento presente empañado por
algo que ha sucedido y que no debió suceder, o como una deficiencia porque algo
que debió suceder no sucedió. Entonces pasan por alto la perfección profunda,
inherente a la vida misma, una perfección que ya existe y está más allá de lo
que sucede o no sucede, más allá de la forma. Debemos aceptar el momento
presente y hallar la perfección que es más profunda que cualquier forma, y que
está libre del efecto del tiempo.
La alegría de Ser, la única felicidad verdadera, no se puede lograr a través de
la forma, es decir, de las posesiones, los logros, las personas o los sucesos.
Esa alegría nunca llega sino que emana de la dimensión sin forma que reside
dentro de ti, de la consciencia misma y es una misma con tu esencia y con lo que
tú eres.
|
|