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LOS DEVAS Y
LA ENERGIA SEXUAL
1) Otra clave que explica las penosas condiciones imperantes en el mundo
(especialmente en el aspecto sexual) reside en el hecho de que los entes de la
familia humana que contribuyen a constituir este principal centro,
frecuentemente se hipervitalizan; la vitalidad del vehículo físico les indica la
línea de menor resistencia. En otras palabras: Las fuerzas dévicas que forman el
centro y también su actividad, por ahora dominan excesivamente, y el poder que
adquirieron en el sistema solar anterior no ha sido transmutado todavía en poder
espiritual.
2) Hay un grupo peculiar de Agnichaitas -un grupo de Devas del fuego- que han
alcanzado esa etapa de evolución que les permite separarse de su grupo y formar
otro, conectado con cierto fuego en los cuerpos del hombre. Dicho fuego, debido
a su actividad actual y a la orientación de dicha actividad, es responsable de
la reacción contraria al matrimonio físico y del deseo evidenciado por los
hombres altamente evolucionados para evadir la relación matrimonial y limitarse
a crear en los planos mental y astral. Esto se debe a la actual tendencia de los
devas manipuladores de los órganos genitales inferiores a trasladarse al centro
laríngeo y funcionar allí, empleando la fuerza del fuego kundalínico para
llevarlo a cabo. Todo ello está regido por la ley de evolución, pero en el
intervalo entre la causa y el efecto esperado puede producirse mucho daño al
evadir la ley y verse el consiguiente sufrimiento. Por lo tanto, debido a la
violenta reacción actual contra las leyes que protegen a la civilización, se ha
decidido que la naturaleza de los devas, su función y el lugar que ocupan en el
esquema de las cosas sean parcialmente revelados al hombre, debiendo divulgarse
la estrecha relación y dependencia que tiene el hombre con ellos. Al mismo
tiempo no debe darse información respecto al método para establecer contacto ni
las palabras por las cuales pueden ser controlados.
El laxismo en las relaciones matrimoniales, debido a esta causa particular, se
observa únicamente entre las personas altamente evolucionadas y entre los
pensadores independientes de la raza. Un laxismo similar entre las masas y los
tipos inferiores de la humanidad se basa en una razón diferente; la promiscuidad
imperante se debe a cierto desarrollo de la naturaleza animal en su
manifestación más inferior. Ambas causas deberían ser consideradas por aquellos
que sienten de corazón las necesidades actuales de la civilización. Así podrán
colaborar con el Mahachohan en el tan necesario trabajo de trasladar la fuerza
desde un centro inferior a otro superior e impedir (por medio del conocimiento)
el libertinaje incidental. Esto evitará la profanación del gran amor o impulso
sexual inmanente en la naturaleza.
El rayo del ceremonial ha sido llamado a menudo "el ritual matrimonial del
Hijo", porque en este rayo el Espíritu y la materia debieran encontrarse y
unirse. Este hecho debería tenerse en cuenta en los próximos cien años, pues se
producirán grandes cambios en las leyes del matrimonio. La indiferencia actual
traerá inevitablemente una reacción, y las leyes serán más rigurosas a fin de
proteger a la raza durante el período de transición. Dichas leyes no tendrán por
finalidad dificultar más la disolución de las relaciones matrimoniales, sino un
efecto contrario; la nueva generación será debidamente instruida y protegida, no
permitiéndose contraer matrimonio en forma indiscriminada y precipitada; tampoco
se permitirá a la juventud contraer precipitadamente obligaciones matrimoniales.
No es necesario extenderme más sobre esto, los hombres sólo aprenden
solucionando sus propios problemas, y todo lo que se nos permite, a quienes
trabajamos internamente, es hacer una insinuación o indicación.
3)
…Un misterioso grupo de devas (están) íntimamente relacionados en la actualidad
con la expresión sexual de la familia humana en el plano físico. Grupo que en
esta oportunidad ha sido impulsado a la existencia, y personifica el fuego de la
expresión sexual tal como lo comprendemos, impulso o instinto que se halla
detrás del deseo sexual físico. Dominó en la cuarta raza raíz, época en que las
condiciones sexuales alcanzaron una etapa de increíble horror desde nuestro
punto de vista. A dichos devas se los va controlando gradualmente y, cuando el
último lemuriano haya pasado a la quinta raza raíz, este grupo, lenta y
totalmente, habrá desaparecido del sistema solar. Se halla relacionado con el
"fuego" pasional del Logos solar y con uno de Sus centros en particular; dicho
centro está paulatinamente entrando en la oscuridad y su fuego será transferido
a un centro más elevado.
4) El problema del magnetismo está estrechamente vinculado con el problema del
sexo. En el estudio oculto respecto a la diseminación de la vida simiente y de
los gérmenes del reino vegetal; en la comprensión de la parte desempeñada por
esos organismos milagrosamente desarrollados -las hormigas y las abejas-, y
posteriormente en la investigación realizada por quienes han despertado la
visión sobre el trabajo de los constructores etéricos, los duendes y las hadas,
se arrojará una nueva luz sobre el sexo y la función que cumple en la
interrelación de las vidas y la creación de las formas. Respecto a este aspecto
de la verdad profundamente esotérica no puedo explayarme, porque es el efecto de
la actividad de las vidas solares del sistema solar y no es posible ocuparnos de
ellas.
5) El desarrollo de la visión etérica y el consiguiente reconocimiento dévico,
dará lugar a un cambio misterioso en la actitud de los hombres y mujeres hacia
la cuestión sexual, el matrimonio y la procreación. Este cambio se deberá a la
comprensión de la verdadera naturaleza de la materia o aspecto madre, y el
efecto que produce el Sol sobre la sustancia. La unidad de la vida será
reconocida como hecho científico, y la vida en la materia dejará de ser una
teoría para convertirse en un fundamento de la ciencia. Sobre esto no podemos
extendernos aquí.
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