EUCALIPTO (Eucaliptus sp.)
El eucalipto es un árbol
majestuoso que confiere aspecto señorial a cualquier jardín capaz de
albergar sus extraordinarias dimensiones. Sin embargo, la enorme necesidad
de agua, absorbida por sus raíces, dificulta y, a veces, imposibilita el
desarrollo de otras plantas en sus proximidades.
CARACTERÍSTICAS
Árbol siempre verde, de
rápido crecimiento que, en condiciones favorables, puede alcanzar los 100 m
de altura. Es característico el crecimiento helicoidal de la corteza: parece
como si el árbol fuera retorciéndose al crecer.
Posee dos tipos de hojas
bien diferenciadas: en las ramas jóvenes crecen hojas aovadas y opuestas,
mientras que las características hojas alargadas, en forma de hoz, se forman
en las ramas adultas. Las flores se originan en el interior de una cápsula
dura, cónica, con tapa. Al florecer, se desprende la tapa y aparecen los
numerosísimos estambres blancos que rodean el pistilo central. Tanto las
hojas como los tallos y las cápsulas florales huelen a esencia y poseen un
sabor amargo.
LOCALIZACIÓN
El eucalipto es originario
de Australia y Tasmania, donde fue descubierto en 1792. Se introdujo en
Europa y América en la segunda mitad del siglo XIX, como árbol ornamental y
para aprovechar sus propiedades terapéuticas y como desecador de marismas en
zonas endémicas de paludismo. Se adapta perfectamente a los climas
templados.
PRINCIPIOS ACTIVOS
Las hojas son los órganos
que contienen esencia en mayor cantidad (un 3 %), siendo su principal
componente el eucaliptol. Además, poseen taninos, resina y principios
amargos.
PROPIEDADES MEDICINALES
En el siglo XIX, en el
continente americano se plantaban eucaliptos para luchar contra la malaria
y, puesto que había una relación causa-efecto (donde había eucaliptos no
había malaria), se creía que las hojas influían en la curación de la
enfermedad.
Calma la tos y fluidifica
los esputos, y es eficaz en las afecciones de las vías respiratorias,
especialmente en bronquitis y procesos asmáticos. Actúa también como
antiséptico; esta propiedad es aprovechada en infecciones de las vías
urinarias. Debido a los taninos que contiene, también se ha utilizado como
astringente (contra las diarreas).
RECOLECCIÓN
Se utilizan exclusivamente
las hojas falciformes (en forma de hoz), que pueden cortarse en cualquier
época del año a condición de que estén totalmente formadas. Las cápsulas, si
se requieren por su fragancia, deben tomarse cuando ya se han abierto, en
otoño o invierno.
USOS Y APLICACIONES
Se toma en infusión,
preparada con una o dos hojas como máximo para una taza. También se utiliza
en inhalaciones: se pone a hervir un recipiente con agua y un manojo de
hojas (puede añadirse unas hojas de menta). Se mantiene hirviendo a fuego
lento mientras se respira el vapor con una toalla por encima de la cabeza y
colgando por los lados a fin de recoger mejor los vapores.
Si se utilizan
humidificadores ambientales, puede añadirse alguna hoja al agua a fin de
aromatizar suavemente el aire.
Las cápsulas de las flores
también pueden ser útiles para dar sensación de frescor al interior de los
armarios, o para ocultar el olor a tabaco en los automóviles. |