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CÓMO ACTUAR ANTE LOS CAMBIOS FAMILIARES: SEPARACIÓN DE LOS PADRES.
PRESENTACIÓN
Los casos de separaciones conyugales no sólo se han «disparado» en los últimos
años, sino que constituyen una cifra en constante aumento. Si antes un divorcio
era un hecho aislado, excepcional, ahora las estadísticas reflejan la tasa de
divorcios con las que concluye no ya el primer matrimonio, sino incluso el
segundo (en Estados Unidos, por ejemplo, es un 10 por ciento más alta en el caso
del segundo). Los motivos son múltiples (la mayor autonomía de la mujer, el
hecho de que hombres y mujeres se relacionen más entre sí...). Lo que resulta
claro es que los cambios acaecidos en la sociedad favorecen estos procesos y
que, consecuentemente, las legislaciones vigentes facilitan que se lleven a
cabo. Por lo general, la ruptura matrimonial conlleva serias repercusiones para
los hijos. Normalmente provoca en los niños bastantes síntomas que afectan
negativamente a su autoestima. También se aprecian cuadros depresivos, de
ansiedad, angustia y fracaso escolar. (Es llamativo que los padres pidan
orientación a los psicólogos una vez que se han separado, pero no antes). Dentro
de las vivencias del niño, resalta la pérdida de seguridad, que se pregunte:
¿qué será de mí mañana? ¿Dónde viviré? ¿Podré seguir asistiendo al mismo
colegio? Los niños de padres separados pueden llegar a utilizar el proceso de
separación para su conveniencia. Otras veces vemos a hijos que son utilizados
por los progenitores y acaban devolviendo la partida.
Ante esto cabe preguntarse si, pensando en el bien de los hijos, es bueno
separarse o no. Es difícil dar una repuesta, pero lo que es indudable es que
cuando el ambiente está gravemente enrarecido, cuando no hay amor, se atisba la
violencia o la falta de respeto, lo mejor es no mantener una situación
artificial, incompatible con lo que debe ser un hogar. Exponemos a continuación
cómo es el proceso de separación y cómo afecta a los niños, pues el que se haga
bien o mal por parte de los adultos será causa directa del comportamiento futuro
de sus hijos.
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