RECETAS
CON POLENTA
El
término polenta proviene del latín «polenta» que significa torta de harina. Es
la sémola que se extrae del maíz, originario de América Central.
La
polenta es ligeramente escasa en proteínas por lo que se usa como alimento de
complemento.
Es una
sémola que se adapta fácilmente tanto a platos de invierno como de verano,
dependiendo de su elaboración. Su uso también es frecuente en repostería debido
a su ductilidad para adoptar las formas deseadas, una vez fría.
Si bien
se trata de un alimento típicamente italiano, no resulta extraño a nuestro
paladar.
De fácil cocción, muy buena para hacer desayunos, sopas, tartas, croquetas e
incluso pasteles.
La
polenta necesita una atención especial, si la perdéis de vista mientras se
cocina, se pega, se quema, se forman grumos, así que hay que removerla sin parar
y vigilar que no se quede sin agua. Es muy sabrosa si se condimenta
adecuadamente.
POLENTA
AL TOMILLO (2 personas)
Ingredientes:
1 taza de
polenta
3 tazas
de agua
1 cebolla
Tomillo
Aceite de
sésamo
Tamari
Sal
Elaboración:
Poner el
agua a hervir con una ramita de tomillo y una pizca de sal.
Cortar la
cebolla en medias lunas y saltear hasta que esté tierna, condimentar con tamari.
Sacar la ramita de tomillo del agua, bajar el fuego y echar la polenta sin parar
de remover hasta que haya absorbido toda el agua. Añadir la cebolla y remover
bien. Servir caliente o templada.
Variante:
con puerros salteados, ajos, chalotes...
Nota: A
veces, según el tipo de polenta, se absorbe más o menos agua; si a los 5 minutos
no queda agua en la olla, añadir un vaso más.
POLENTA
PARA DÍAS DE FIESTA (4 personas)
Ingredientes:
1 taza de
polenta
2 tazas y
1/2 de agua
1 cebolla
1/4 de kg
de champiñones
100 g de
maíz
100 g de
guisantes
8 a 10
nueces tostadas
1
remolacha pequeña cocida
1 ajo
tierno
50 g de
queso parmesano
Olivas
negras
Tamari
Sal
Elaboración:
Cortar la
cebolla, el ajo y los champiñones bien finos y saltear con unas gotas de aceite
a fuego lento durante 5 minutos. Añadir los guisantes y el maíz. Condimentar con
tamari y cocinar a fuego medio y tapado 15 minutos, con un poco de agua, la
justa para que no se quemen las verduras. Cocinar la polenta con el agua y una
pizca de sal. Remover sin parar hasta que haya absorbido toda el agua. Añadir el
salteado y agregar las nueces troceadas. Poner la polenta en un recipiente para
horno, decorar con la remolacha troceada o rallada, las olivas y el queso
rallado. Gratular hasta que dore.
CROQUETAS
CON SOBRAS DE POLENTA
Aprovechando restos de cereales, como polenta, arroz, mijo, cuscús, podemos
elaborar deliciosas croquetas.
Añadir
zanahoria rallada, perejil y un diente de ajo trinchado, dar forma de croquetas,
pasar por pan rallado y freír. Servir acompañada de verduras. También podéis
poner trocitos de almendras, piñones, pasas, semillas, etcétera. Otra forma de
hacerlas es poniéndolas al horno hasta que queden crujientes.
TORTILLA
DE POLENTA (2 personas)
Ingredientes:
1 taza de
polenta
2 l y 1/2
de agua
1 cebolla
2 dientes
de ajo
1 huevo
Semillas
de sésamo trituradas
Aceite
Perejil
Tomillo
Sal
Elaboración:
Cortar la
cebolla en medias lunas y trinchar el ajo. Saltear con unas gotas de aceite,
añadir una pizca de sal y tomillo. Agregar, en la misma paella, la polenta y
remover bien. Echar el agua y cocinar de 10 a 15 minutos, sin parar de remover.
Dejar enfriar y moldear la polenta en forma de tortilla; añadir el huevo batido.
Pincelar
de aceite una paella y poner la polenta, dar vuelta y vuelta hasta que quede
bien dorada por ambas partes.
Servir
con el sésamo triturado y el perejil picado.
Variante:
Es también muy sabrosa con mijo y le podéis añadir pipas de calabaza o de
girasol que darán un punto crujiente y realzarán el sabor.
POLENTA
AL HORNO (2 personas)
Ingredientes:
1 taza de
polenta
2 tazas
de agua
1 cebolla
1
zanahoria
1 taza de
leche de soja
Unas
cuantas nueces troceadas
Sal
Elaboración:
Cocinar
la polenta con el agua y una pizca de sal durante 15 minutos sin dejar de
remover. Saltear la cebolla cortada en medias lunas y la zanahoria a cerillas
con unas gotas de aceite; salar. Añadir el salteado a la polenta. Echar la
polenta en una sartén con unas gotas de aceite y remover bien; añadir la leche
y, sin dejar de remover, esperar hasta que haya absorbido toda la leche. Apagar
el fuego y añadir las nueces tostadas y troceadas. Poner el cereal en un molde
alargado para horno, previamente aceitado. Hornear a fuego lento 30 minutos.
Nota: Se
puede tomar caliente o frío, también es delicioso para meriendas, desayunos o
snacks.
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