GERMINADOS DE SEMILLAS
Los
germinados son uno de los alimentos vivos más antiguos y un manantial de
clorofila, enzimas, vitaminas y aminoácidos (proteínas). Están indicados en
cualquier tipo de alimentación y para todas las edades, y su obtención es muy
sencilla y económica. Su listado de virtudes es impresionante:
-
favorecen la regeneración celular
- ayudan
a perder peso, bajan los niveles de colesterol
- ayudan
a la eliminación de toxinas
-
incrementan la concentración
- mejoran
la calidad de piezas dentales, piel y cabello
- aportan
la energía suficiente para la práctica de deportes exigentes
- mejoran
el olor y el sabor de los fluidos corporales (semen, saliva y transpiración)
- ayudan
en la digestión, incrementan la potencia sexual
Los
germinados crudos son los que mejor conservan sus vitaminas además de su frescor
y su textura crujiente lo cual permite que sean un complemento ideal en
ensaladas, pero también como parte de un bocadillo o incluso complementando una
sopa. Ofrecen una aportación nutricional muy interesante por su riqueza en
proteínas y autonomía alimentaria. Combinados con cereales, aportan proteína de
gran calidad, contienen minerales y vitaminas abundantes. En definitiva, los
germinados tienen un papel fundamental en la dieta de las personas vegetarianas
y muy especialmente de las veganas.
Cultivo fácil y saludable
Resulta
muy fácil preparar en casa brotes tiernos y nutritivos a partir de semillas
germinadas. Una de las ventajas de los germinados es que podemos producirlos y
conservarlos en casa. De este modo nos convertimos en microhortelanos sin salir
de nuestra cocina. Es un cultivo muy sencillo que podemos practicar merced a los
llamados germinadores que no son más que bandejas que permiten depositar las
semillas para germinar sobre un recipiente con agua que les da humedad y luego
permite alimentar sus raicillas.
Los
métodos de germinado son variados. Algunos recomiendan poner en remojo las
semillas unas horas (varia según las semillas entre 4 y 10 horas, aunque de
media, con 6 horas bastará). Una condición clave es que las semillas para
germinar sean de cultivo biológico y que no hayan sido tratadas para plantar con
fertilizantes y otras sustancias o que no hayan sido tostadas o congeladas.
El
proceso de germinación acontece mejor en lugar cálido y oscuro ya que esto
estimula el fenómeno. A los 2 o 3 días empiezan a salir los brotes, aunque el
tiempo de germinación depende de la semilla escogida. Cuando los germinados
tengan unos 2 cm de largo, se pondrá el germinado en un sitio luminoso, sin que
le de el sol directamente para que las hojas vayan adquiriendo su color verde.
Una vez terminado el proceso de germinación. Los brotes se pueden guardar en la
nevera donde se conservarán sin problema durante más o menos una semana.
La
clave de su poder nutritivo
Los
germinados son vegetales vivos que se encuentran en pleno crecimiento en el
momento de su consumo. Por tanto se trata de un superalimento que además se
desarrollan en cualquier época del año mientras haya un clima benigno y la
humedad y el oxígeno suficiente. Con menos de una semana (alrededor de cinco
días conseguimos un buen puñado de semillas germinadas que serán un complemento
ideal para nuestra alimentación por su aporte en vitaminas y proteínas. No
necesitan ni tierra ni sol sino tan sólo humedad para que la semilla inicie el
proceso de consumir su “mochila de reservas nutritivas” y empiece a
desarrollarse como planta sacando el brote y las raíces.
El proceso de germinado es el mismo que si queremos obtener una planta para
cultivar en el huerto o nuestra terraza. Sin embargo, se da la posibilidad de
que podamos obtener de este ya un alimento crudo y entero lleno de propiedades
nutritivas y muy digestivo. Nuestro organismo los asimila muy fácilmente y
estimula los procesos digestivos contribuyendo a la regeneración de nuestra
flora intestinal.
Las
personas que practican una dieta vegetariana pero que no toleran las legumbres
(que son una importante fuente de proteínas clave para nuestro organismo) tienen
en los germinados una alternativa muy saludable. Los germinados también pueden
cocerse (es un plato muy típico de la cocina china, los germinados de soja
hervidos y salteados con tamari), y que aportan pues matices gustativos
interesantes, pero que recién sacados del germinador, crudos y frescos es cuando
son más saludables.
Cosecha tus germinados en casa
El
microcultivo de semillas para obtener germinados es una actividad ideal para las
personas que quieren seguir una alimentación sana y a la vez tener el placer de
cosechar sus propios complementos nutritivos como son los brotes.
No todo
el mundo tiene espacio para tener su propio huerto urbano en el balcón o en la
terraza. Sin embargo, todos podemos tener nuestros propios microhuertos para
cosechar germinados con semillas cien por cien ecológicas.
La
germinación de semillas es una actividad que nos aporta el placer de la
autonomía alimentaria. Además constituye una experiencia sana, divertida y
didáctica para toda la familia.
En el
mercado encontramos semillas ecológicas para germinar de alfalfa, lentejas,
mostaza, sésamo, soja verde, rabanillos, col lombarda, trigo, ajo, y la mezclas
de semillas de las que sus brotes que garantizan una mezcla altamente nutritiva
y energizante. |