LOS ALIMENTOS PARA BEBÉS

La alimentación durante los primeros meses de vida del niño es fundamental para garantizar su salud en edades posteriores, para asegurar un buen funcionamiento de su aparato digestivo y para adaptar su sistema inmunitario. Hasta los cuatro meses de edad lo ideal sería que el bebé, si es posible, no recibiera otra alimentación que la leche materna. Sólo a partir del cuarto mes el aparato digestivo del bebé se encuentra en condiciones de aceptar alimentos más sólidos, como papillas de cereales y frutas y potitos de verduras, legumbres y frutas.

Estos alimentos para el bebé pueden ser, además de papillas y potitos, leches biológicas, leches vegetales, muesli y zumos de frutas. Serán elaborados con ingredientes naturales, en los que se los contenidos en sal y endulzantes serán reducidos. A la hora de elegir el alimento más apropiado para el bebé, además de considerar su edad, se ha de tener en cuenta la incidencia de alergias: al gluten, a la lactosa, a los huevos o a ciertas frutas, como a las fresas.

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