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Los alemanes de la
OTO
Después de asumir la jefatura de la OTO a partir de 1922, Crowley estableció
interesantes contactos con iniciados alemanes tipo a Karl Germer (Frater
Saturnus, 1885-1962), de cara a extender la OTO. Germer vendió las
propiedades que tenía en Viena y se estableció en Munich para dar vida a la
“Pansophia”. La sociedad decidió editar varios libros de Crowley y
prácticamente quedó sometida al influjo de la OTO y el Frater Baphomet
(Aleister Crowley). Pero varios adeptos de la Pansophia tuvieron serios
problemas a la hora de aceptar el liderazgo de Crowley y su Liber Legis
(Libro de la Ley), revelado al mismo por una entidad denominada Aiwass en El
Cairo en abril de 1904. Heinrich Traenker se quedó “horrorizado” al leer
algunos versículos del Liber Legis:
“¡Maldecidlos! ¡Maldecidlos! ¡Maldecidlos!
Gracias a mi cabeza de halcón, pico los ojos de Jesús,
mientras pende de la cruz.
Bato mis alas ante el rostro de Mahoma, y le dejo ciego.
Con mis garras arranco la carne del hindú,
del budista, del mongol, y de todo aquel que salmodia oraciones.
¡Bahlasti! ¡Ompedha! Escupo en vuestras creencias de crápulas”.
Por fortuna, algunos días después, el problema con Traenker desapareció, ya
que tuvo una iluminación y comprendió las partes más oscuras del libro,
aunque más tarde el propio Traenker tuvo serias dificultades para asumir la
Misa Gnóstica de Crowley, provocando que dos tercios de los miembros de la
Pansophia fueran a parar a la Fraternitas Saturni u otras sociedades
secretas alemanas. Germer se puso del lado de Crowley y no le abandonó
jamás.
Ya en 1935, los nazis prohibieron la Astrum Argentum -una orden liderada por
Crowley desde 1906 que pasó a depender de la OTO-, la OTO y otras órdenes
masónicas, rosacruces, templarias... Los nazis y los fascistas no podían
perdonar a esas órdenes su ideología y Karl Germer, el Frater Saturnus, como
responsable de la OTO alemana, fue detenido y conducido a un campo de
concentración. A Martha Küntzel, otra responsable de la orden, le
confiscaron todo el material que poseía. Germer pasó diez meses en el campo
de concentración, luego fue puesto en libertad y, al estallar la guerra, las
autoridades belgas lo volvieron a detener a causa de su nacionalidad alemana
y lo deportaron a Francia, donde terminó internado hasta su liberación
definitiva en 1941. Finalmente conseguiría un camarote en un barco que se
dirigía a los Estados Unidos.
Resulta curioso que la OTO de Crowley, al igual que la Orden Illuminati de
Gabriel López de Rojas, tropezase también con los “cultos de esclavos”, los
esoteristas nazis y los conservadores políticos y religiosos de todo pelaje
y condición. |
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