Carta número XIX.
La carta nos habla de un Sol que brilla intensamente. Dos niños abrazados se
sienten felices y todo está bellamente iluminado. El suelo brilla y el
ambiente parece fabuloso. La palabra clave es confianza en ti mismo y
felicidad.
Esta carta representa la energía elevada a la
que uno puede acudir cuando a logrado integrar y aceptar esas partes de sí
mismo que antes rechazaba.
Es una energía muy poderosa,
relacionada con la que comentábamos en la carta de la templanza, pues
alimenta la evolución, la vida, nuestro ser. etc. Cuando descubrimos cómo
utilizarla en nuestro camino adecuadamente todo se transforma y obtienes
todo lo que necesitas y es tan simple como sentirse seguro de si mismo, con
confianza.
Pero atención, pues como todo, tiene una
contrapartida ya que no debes intentar poseerla como algo propio, pues
enseguida tu ego se dispararía y entonces te convertirías en un manipulador,
no escucharías a los demás y por lo tanto por la ley de causa efecto se
perdería todo lo que hubieras conseguido hasta entonces, viniéndonos de
vuelta un suceso más difícil para que reacciones y te des cuenta de la
verdad de la enseñanza.
EJERCICIO:
¿Y cómo tomamos contacto con esta energía? Pues estando seguro de ti mismo.
Para ello lo primero es tomar contacto con nosotros mismos, con nuestro Yo
Soy y aceptar todo lo que no nos guste de nosotros, esa "sombra" que hay
dentro de todos nosotros.
Puede ser a través de la
meditación, pero si todavía no la dominas adecuadamente aquí tienes un
pequeño ejercicio para empezar. Durante esta semana y cuando te encuentres
en una situación que te provoca miedo o inseguridad, que no sabes como
resolver, ponte en una postura cómoda respira hondo y relájate todo lo que
puedas, lentamente irás imaginándote que eres una montaña. Primero te
encontrarás en un valle donde brilla el sol, pero poco a poco verás como cae
una tempestad sobre ti, la montaña. Fuerte viento, nieve, lluvia,... todo
sobre ti.
Observa qué es lo que te ocurre. Y si ves que te
hace daño recuerda que la montaña seguirá ahí pase lo que pase, nada la
dañará, nada puede dañarte.