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PROTOCOLO XVI
Las universidades inofensivas.- Abolición de los clásicos y de la historia
antigua.- La educación y la profesión.- Reclame de la autoridad del
gobierno en las escuelas.- Abolición de la enseñanza libre.- Las nuevas
teorías.- La independencia del pensamiento.- Enseñanza por imágenes.
1.- Con el fin de destruir todas las fuerzas colectivas, excepto las
nuestras, suprimiremos las universidades, primera etapa del colectivismo,
y fundaremos otras con un espíritu nuevo. Sus jefes y profesores serán
preparados secretamente en su labor, por programas de acción secretos y
minuciosos, sin poder apartarse de ellos en ningún punto. Serán nombrados
con especial prudencia y en todo dependerán del gobierno.
2.- Excluiremos de la enseñanza el Derecho Cívico, así como todo lo demás
que tenga relación con las cuestiones políticas. Estas materias serán
enseñadas a unas cuantas decenas de individuos seleccionados en virtud de
sus aptitudes sobresalientes. Las universidades no deben dejar salir de
sus aulas a esos picos de oro forjadores de constituciones como si
compusieran comedias o tragedias y que se ocupan en cuestiones políticas
de las que ni sus padres comprendieron jamás una palabra.
3.- El falso conocimiento que tienen los hombres de esta materia, las más
veces ha dado origen a los utopistas y a los malos ciudadanos: a vuestra
vista está lo que la educación general de hoy ha hecho de los GOYIM. Hemos
tenido necesidad de inyectar en su educación todos esos principios que tan
brillantemente nos han servido para debilitar su orden social. Pero una
vez que nos hayamos adueñado del poder, proscribiremos de la educación
todas las materias de enseñanza que pueden traer el desorden, y haremos de
los jóvenes, niños obedientes a las autoridades y amantes de los que
gobiernan, como un apoyo y una esperanza de paz y de tranquilidad.
CAMBIAREMOS LA HISTORIA
4.- Reemplazaremos el Clasicismo, haciendo otro tanto con el estudio de la
historia antigua que presenta más ejemplos malos que buenos para el
estudio del programa del porvenir. Borraremos de la memoria de los hombres
todos los acontecimientos de los siglos pasados que no nos son gratos, no
conservando sino los que dan a conocer las faltas de los gobiernos GOYIM.
La vida práctica, el orden social natural, las relaciones de los hombres
entre sí, la obligación de evitar los malos ejemplos del egoísmo, que
siembran la semilla del mal, y otras cuestiones semejantes de carácter
pedagógico quedarán en la primera línea del programa del porvenir, en la
enseñanza de cada profesión, que según ella sea, será distinto, y que no
generalizará la enseñanza bajo cualquier pretexto. Esta forma de plantear
la cuestión tiene una importancia particular.
5.- Cada clase social debe ser educada dentro de los límites precisos, de
conformidad con el destino y el trabajo que le son propios. Los genios
potentes siempre han sabido y sabrán deslizarse entre las otras clases;
pero dejar entrar en clase extraña a los que pueden considerarse como
valores negativos, permitirles usurpar el lugar que correspondería a otros
por el nacimiento y la profesión al igual que a esos mismos genios
excepcionales, es una verdadera locura. Vosotros sabéis qué consecuencias
ha tenido para los GOYIM este absurdo manifiesto.
6.- Para que el gobierno tenga el lugar que le corresponde en los
corazones y el ánimo de sus súbditos, es necesario que mientras dure se le
enseñe al pueblo en las escuelas y en las plazas públicas la importancia
del gobierno y cuáles son sus deberes, y en qué cosas su actividad puede
contribuir al bienestar del mismo pueblo.
7.- Aboliremos toda enseñanza libre. Los estudiantes tendrán el derecho de
unirse con sus padres en los establecimientos escolares, como se
acostumbra hacerlo en los clubs y en los días de fiesta, los profesores
darán conferencias, de las llamadas libres, acerca de las relaciones de
los hombres entre sí; sobre las leyes de la imitación; sobre los malos
resultados de la competencia limitada; en fin, sobre filosofía de las
nuevas teorías que el mundo todavía no conoce. Haremos de estas teorías un
dogma y nos serviremos de ellas para atraer a los hombres a nuestra fe. Al
terminar la exposición de nuestro programa de acción en el presente y en
lo futuro, os expondré las bases de esas teorías.
8.- En una palabra, sabiendo por la experiencia de muchos siglos, que los
hombres viven y se dirigen por las ideas; que éstas no les son inculcadas
sino por la educación impartida con igual resultado a todas las edades con
procedimientos diferentes, entiéndase bien: nosotros adoptaremos y nos
asimilaremos en provecho nuestro los últimos resplandores o destellos del
pensamiento independiente que desde tiempo atrás venimos dirigiendo hacia
las materias e ideas que nos son necesarias. El sistema de represión del
pensamiento ya está en vigor en el método llamado Enseñanza por medio de
la imagen, que debe transformar a los GOYIM en animales dóciles, que no
piensen, que necesiten la representación por las imágenes para
comprenderlas... En Francia, uno de nuestros mejores agentes, Bourgeois,
ha divulgado el nuevo programa de educación por medio de la imagen. |
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