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El
palabreo místico.
Él
mira desde lejos
Hacia Tung-nan. (1)
De pie entre la danza de las hojas,
el cielo entero teñido de otoño,
siente que el fresco le invita
a revestirse de una sobretúnica.
Este anciano inmortal,
habiendo alcanzado la plenitud
contempla las nieblas
de cinabrio que se arremolinan
junto a los portales del cielo.
Ociosamente se une a los pinos (2)
para sorber los matices del monte.
1. Hacia el sudeste, cruzando toda China en diagonal.
2. Conseguida la meta, no le queda nada por hacer sino disfrutar de su
familiaridad con la naturaleza.
Comentario.
En este poema, Li F'êng rinde homenaje a un sabio de la provincia de Kan su,
en el extremo noroeste de China, por la cual debió pasar Lao-tzü montando
sobre su buey en dirección a los desiertos de Asia Central. El poeta nos
habla de nuevo de la hermosura de la naturaleza y de la alegría de la
realización mística. Las nieblas color de cinabrio que se arremolinan junto
a los portales del cielo sugieren el yoga alquímico en el que el cinabrio,
entendido literalmente o simbólicamente, juega un papel importante. |
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